Dos situaciones con muchas similitudes y que suelen confundirse.
También puede deberse a:
– Una vida sedentaria.
– Problemas de el funcionamiento de los riñones, el hígado o el corazón.
O puede ser un síntoma premenstrual.
Sobre los medicamentos, la misma fuente indica que el edema puede estar relacionado con las siguientes opciones:
– Antiinflamatorios no esteroideos, por ejemplo el ibuprofeno. Cuando es ingerido en forma habitual.
– Algunas presentaciones para regular la presión arterial.
Si se habla de aumento de peso, más allá de la dieta o el ejercicio, la retención de líquidos puede influir.
También puede ser un síntoma de algunas situaciones médicas, tales como:
– Síndrome de Prater-Willi.
– Síndrome de Cushing.
– Artritis (por la disminución de la actividad física).
– Hipotiroidismo.
O medicamentos como:
– Antidepresivos
– Anticonvulsivos
-Antipsicóticos
– Esteroides
– Betabloqueantes
– Fármacos para la diabetes
En cualquier caso es importante consultar al médico, El evaluará la situación e indicará cuáles son los pasos a seguir más adecuados. Una advertencia es no abandonar un tratamiento por decisión propia.