Este año se adelantó el pico de contagios que suele ocurrir a mediados de junio y los hospitales públicos y privados sufren una “sobredemanda” de consultas. Cuáles son los síntomas y cuándo acercarse a un centro de salud
La temporada de bronquiolitis se adelantó. Lo habitual es que su pico se produzca durante junio, pero los casos crecieron significativamente durante mayo. Esto generó una imagen que se repite cada invierno: demoras en las guardias y salas de espera con gran cantidad de niños pequeños y cuadros con complicaciones respiratorias.
Desde el Ministerio de Salud de la Nación indicaron el aumento de las consultas por cuadros respiratorios empezó a observarse a principios de marzo. “Esta tendencia se consolidó en la semana 20 del calendario epidemiológico (del 14 al 20 de mayo) con una mayor circulación del virus sincitial respiratorio y un aumento de las internaciones por bronquiolitis, cuando habitualmente este pico estacional se produce en la semana 24 (a mediados de junio)”, señalaron desde la cartera sanitaria que dirige Carla Vizzotti.

La bronquiolitis es una infección respiratoria aguda que ocurre con mayor frecuencia en los meses de otoño-invierno y afecta sobre todo a los menores de 1 año. Puede ser causada por distintos virus; el más común es el Virus Sincicial Respiratorio (VSR). El VSR también causa infecciones respiratorias que pueden ser graves en adultos mayores, como la neumonía.
Cuáles son los síntomas de la bronquiolitis

– Respiración rápida, con silbidos o ronquidos.
– Se le hunde el pecho al respirar.
– Tiene más de 38° de fiebre de manera persistente y/o mocos.
– Pérdida del apetito.
– No puede beber o amamantarse.
– Está decaído/a y se ve enfermo/a.
Al no existir tratamientos para el virus (no hay jarabes ni antibióticos), es fundamental controlar que el compromiso respiratorio no afecte la oxigenación normal y asegurarse de que el bebé pueda alimentarse e hidratarse lo suficientemente bien, pese a la dificultad respiratoria, advierten las autoridades sanitarias.
Cuidados para prevenir enfermedades respiratorias es importante:

– Lavarse las manos periódicamente, especialmente después de tocar manijas, dinero, objetos de oficina, juguetes de otros niños/as, etc.
– Usar alcohol en gel cuando no haya agua y jabón para lavarse las manos.
– Al toser o estornudar, cubrirse la boca y la nariz con el codo.
– Limpiarse la nariz con pañuelos descartables.
– Evitar el contacto con personas que tengan enfermedades infecto-contagiosas.
– Evitar el humo de cigarrillos y braseros cerca de los niños y niñas.
– Ventilar siempre los ambientes.
– Mantener los esquemas de vacunación al día.
