El hermano de Catherine Fulop lo padecía desde 2019. Claves para evitar su aparición y detectarlo a tiempo.
Catherine Fulop manifestó en las redes sociales su enorme tristeza por la muerte de su hermano, Jorge Gerard. El hombre -que vivía en Venezuela- había sido diagnosticado con cáncer de laringe en 2019.
La laringe está localizada en el cuello, sobre la abertura de la tráquea. Es uno de los órganos que nos permite hablar, ya que contiene las cuerdas vocales.
El cáncer de laringe se encuentra englobado dentro de los “tumores de cabeza y cuello”, que incluyen los que se originan en la mucosa de la vía aerodigestiva superior.
“Dentro de este grupo, el cáncer de laringe junto con el cáncer de cavidad oral (boca) o de faringe (garganta) son los más frecuentes“, dice a Agustín Falco, jefe del área de tumores de cabeza y cuello/tiroides del Instituto Médico Alexander Fleming.
Más común en los hombres
Consultada por este diario, Dora Latourrette, médica de planta del servicio de otorrinolaringología del Hospital Italiano, comenta -en base a datos de Estados Unidos- que el cáncer de laringe es cuatro veces más común en hombres que en mujeres.
“Es más común en hombres aunque, en los últimos tiempos, hubo un aumento en mujeres por el mayor consumo tabaco y de alcohol”, acota.
Al respecto, Falco explica que no hay factores ni genéticos ni hormonales bien establecidos, bien estudiados, que determinen por qué es mayor la incidencia en el sexo masculino.
“La mayor incidencia tiene que ver, fundamentalmente, con el mayor consumo de tabaco y por más tiempo”, señala el especialista que es miembro de la Asociación Argentina de Oncología Clínica (AAOC).
El dato es clave para hablar de prevención. Porque, según el oncólogo, reducir el consumo de tabaco y alcohol disminuye el riesgo de desarrollar cáncer de laringe.
Al respecto, Latourrette detalla -en base a datos de Estados Unidos- que la tasa de incidencia viene descendiendo entre 2 a 3%, año tras año, debido a una disminución de este tipo de consumos.
El cáncer número 20
En Argentina, el Registro Institucional de Tumores (RITA) -creado por el Instituto Nacional del Cáncer (INC)- informó que, en el año 2018, el 1,49% del total de los tumores reportados se localizaron en la laringe. De ellos, cerca del 80% correspondieron a hombres.
A nivel mundial, el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (CIIC) de la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que el cáncer de laringe alcanzó 184.615 nuevos casos durante el año 2020.
Esto lo ubicó en el puesto número 20 entre todos los tipos de cáncer a nivel mundial. Una lista que está encabezada por los cánceres de mama, de pulmón y el colorrectal, entre otros.
De esos nuevos casos, la gran mayoría (160.265) se dieron en hombres. Además, según este organismo, en el año 2020 fallecieron en el mundo 99.840 personas a causa de esta enfermedad.
Señales de alerta
Según precisa un artículo del Instituto Nacional del Cáncer de los Estados Unidos, los signos y síntomas del cáncer de laringe son los siguientes:
* Dolor de garganta o tos que no desaparece.
* Dificultad o dolor al tragar.
* Dolor de oído.
* Masa (bulto) en el cuello o la garganta.
* Cambio de la voz o ronquera.
“Estos y otros signos y síntomas pueden obedecer a un cáncer de laringe u a otras afecciones“, aclaran desde la institución. Por lo tanto, recomiendan consultar con un médico en caso de presentarlos.
Diagnóstico y tratamiento
“Más de la mitad de los pacientes recibe diagnóstico y tratamiento antes de que se disemine fuera de la laringe”, comenta Latourrette. Es clave la detección temprana, porque el pronóstico empeora si se esparce hacia tejidos, órganos circundantes o ganglios linfáticos, advierte.
De todas maneras -sigue la otorrinolaringóloga- depende de su estadio y de su ubicación. Puede localizarse en la glotis (contiene las cuerdas vocales), la supraglotis (está justo sobre las cuerdas vocales) o la subglotis (debajo de las cuerdas vocales).
Falco también subraya la importancia del diagnóstico precoz. “En los estadios más tempranos las opciones que tenemos para tratar el cáncer de laringe involucran manejos locales como, por ejemplo, resecciones con láser o la radioterapia o en algunos casos radioterapia más quimioterapia”, comenta.
Y agrega que la cirugía, que consiste en la resección total de la laringe, se reserva únicamente para aquellos casos de una enfermedad más avanzada.
Asimismo, destaca la importancia del manejo en un equipo multidisciplinario con profesionales de diferentes especialidades, como oncólogos, radioterapeutas o cirujanos, que estén involucrados en la toma de decisiones.